KFC y el marketing por valores

Como casi todo el mundo sabe, hoy día es difícil conectar con tu audiencia. Las marcas lo tienen complicado para posicionarse en la mente de los consumidores, porque, en general, somos desconfiados y pensamos que lo que quieren las empresas (y cuánto más grandes, más), es maximizar sus beneficios, sin importarles demasiado dónde nos deje eso a nosotros, sus clientes.

Una de las vías que más se da en la actualidad es la del Marketing por Valores (así lo llamo yo y así lo creo yo).

El Marketing por Valores es el que intenta acercarse a los consumidores por medio de valores positivos para la sociedad. Se podría entender como una especie de RSC (responsabilidad social corporativa).

Hoy no me extenderé demasiado, porque iremos viendo más ejemplos del Marketing por Valores, pero creo que es una estrategia mediante la cuál todos salimos ganando.

Siempre los hay incrédulos que mantienen que todo lo bueno que las marcas aportan a la sociedad (sin estar obligadas a ello) es para ganar adeptos; y, en realidad, puede ser, pero, en cualquier caso, aportan algo bueno.

En este caso, os enseñaré una idea que ha tenido KFC («Kentucky Fried Chicken», una conocida cadena de comida rápida especializada en el pollo frito) en Rumanía.

Rumanía es el país europeo con los peores resultados en los informes de educación, que son llevados a cabo mediante tests a los estudiantes. En concreto es el peor país europeo en cuanto a notas del informe Pisa de Educación Secundaria se refiere (lo que en España equivaldría a la ESO y Bachillerato, es decir, jóvenes entre 12 y 18 años), y ha obtenido recientemente las tasas más bajas de su historia.

Para poner su granito de arena, la marca KFC ha cambiado la manera de acceder al WiFi en sus restaurantes y ahora, para conseguirlo tienes que superar un «test» sobre cultura general.

Esto puede que no consiga que los estudiantes mejoren su rendimiento instantáneamente, pero qué duda cabe de que es una idea original y divertida para acercar la educación a los jóvenes (que son los que más visitan los restaurantes de esta marca).

Sea o no para captar clientes, si todas las empresas tuvieran iniciativas así, la sociedad avanzaría a pasos agigantados porque (y es algo que no me canso de reivindicar) sólo los jóvenes tienen el poder de cambiarlo todo.